¿Qué dice la Biblia acerca de los tatuajes y perforaciones del cuerpo? / Estudio Bíblico
Publicado en 5 Febrero 2010
NUEVAMENTE ACLARO LO SGTE. SI TU NO ERES UN CRISTIANO Y YA TE HICISTE UN TATUAJE O PIERCING, YA NO HAY NADA MAS QUE HACER, DIOS NO TE CONDENA, EL TE RECIBE CON SU AMOR, ESTE MENSAJE ES PARA LOS CRISTIANOS PARA QUE EVITEN TATUARSE O COLOCARSE UN PIERCING, YA QUE, COMO VEREMOS EN ESTE ESTUDIO, LA PALABRA DE DIOS ES MUY CLARA AL RESPECTO.
Respuesta: La ley del Antiguo Testamento ordenaba a los israelitas, “No se hagan heridas en el cuerpo por causa de los muertos, ni tatuajes en la piel. Yo soy el Señor” (Levítico 19:28 NVI). De este modo, aunque los creyentes hoy, no vivan bajo la ley del Antiguo Testamento (Romanos 10:4; Gálatas 3:23-25; Efesios 2:15), el hecho de que hubo una orden contra los tatuajes, debería causar duda en nosotros. El Nuevo Testamento nada dice acerca de que un creyente debería o no tatuarse.
En relación a los tatuajes y a las perforaciones del cuerpo, una buena prueba es determinar si podemos con sinceridad y conscientemente, pedir a Dios que bendiga y use una actividad en particular para Su propio provecho. “Sí, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios (1ª Corintios 10:31). La Biblia no da órdenes contra los tatuajes o las perforaciones del cuerpo, pero tampoco da alguna razón para creer que Dios nos dejaría tatuarnos o perforarnos el cuerpo.
Otro asunto a considerar es la discreción. La Biblia nos manda vestir discretamente (1ª Timoteo 2:9). Un aspecto de vestir discretamente, es asegurarse que todas las partes del cuerpo que deben estar cubiertas lo estén de manera adecuada. Sin embargo, el significado esencial de la discreción, es no llamar la atención. La gente que se viste discretamente, lo hace de manera que no llama la atención. Los tatuajes y las perforaciones del cuerpo, definitivamente llaman la atención. En este sentido, los tatuajes y las perforaciones del cuerpo, no son discretas.
Un principio bíblico importante sobre asuntos acerca de los cuales la Biblia no se refiere específicamente, es que si hay lugar a dudas de que ello agrada a Dios, es mejor no involucrarse en tal actividad. “Todo lo que no proviene de fe, es pecado” (Romanos 14:23). Tenemos que recordar que nuestros cuerpos, tanto como nuestras almas, han sido redimidos y pertenecen a Dios. Aunque 1ª Corintios 6:19-20 no se aplica directamente a tatuajes y perforaciones del cuerpo, ésta nos da un principio, “¿O ignoráis que vuestro cuerpo es el templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis en Dios, y que no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios”. Esta gran verdad debería tener una auténtica orientación sobre lo que hacemos y a donde vamos con nuestros cuerpos. Si nuestros cuerpos pertenecen a Dios, deberíamos asegurarnos de tener Su justo “permiso” antes de que “los marquemos” con tatuajes y perforaciones.
Amigo y hermano en Cristo, si te parece poco convincente esta respuesta, te invito a hacerte 5 preguntas que nos hace el autor del sitio http://www.historymaker.com.ar/es-pecado-tatuarse.html que sin duda nos harán pensar mucho al respecto:
El cristiano tendrá que preguntarse a sí mismo si hacerse un tatuaje puede realmente glorificar a Dios o no. ¿Cuál es el motivo real que hay detrás de hacerse un tatuaje?Aquí es donde sí podemos hacer mención del principio ético fundamental de Levítico: “No ser como las otras naciones”. La persona que se tatúa su cuerpo, ¿lo hace para extender el Reino de Dios en el mundo o lo hace sólo para ir con el flujo de un mundo obsesionado por las apariencias superficiales, la moda y las tendencias? En la mayoría de los casos que conozco, esta última mentalidad es la que prevalece. El Nuevo Testamento nos llama a no conformarnos a este mundo (Romanos 12:2).
Cuando Lutero se defendió en la Dieta de Worms, subrayó que él no iría en contra de la Palabra de Dios o de su conciencia. Si tu conciencia tiene algún escrúpulo con respecto al tema de los tatuajes, entonces definitivamente no debes tatuarte. Es pecado. Todo lo que no proviene de fe, dice Pablo, es pecado (Romanos 14:23). El mero hecho de que alguien se haga la pregunta “¿Es pecado hacerse un tatuaje?” me revela que su conciencia no está en paz respecto a este asunto y por lo tanto, él o ella, no debería tatuarse. Si tuvieras cien por cien de paz y tranquilidad en tu alma sobre el tema, no necesitarías preguntarle a nadie.
Toda la epístola de 1ª Corintios gira en torno al tema del amor cruciforme (que toma la cruz como el centro). Pablo se enfrenta a diez situaciones pastorales diferentes con el mensaje radical de la cruz. Tus acciones, ¿beneficiarían o dañarían a los demás? ¿Van a bendecir u ofender? ¿Van a hacer bien o mal? El cristiano debe darse cuenta de que él (ella) ya no es de su propiedad. Él (ella) vive para el Señor y la iglesia. Si sospecho que un tatuaje puede alterar (perturbar o preocupar) a hombres o mujeres de Dios en mi congregación, entonces pongo mi amor por ellos antes que mis propios deseos y mantengo mi cuerpo limpio, sin tatuajes. Aplico la ley del amor para que otros no se escandalicen por mi acción. Mis acciones tienen efectos positivos o negativos en otros. No quiero hacer daño al cuerpo de Cristo. Así cumplo la motivación apostólica de 1ª Corintios de andar en amor.
Y no sólo los cristianos deben pensar en los demás cristianos, sino en los no creyentes también. ¿Cómo van a reaccionar si me ven testificando de Cristo y también haciéndome un tatuaje? ¿No voy a ser piedra de tropiezo a ellos? ¿No van a pensar que soy un hipócrita? Después de todo, yo soy la Biblia que leen. La impresión que les voy a causar, ¿crees que será beneficiosa o perjudicial? Un chico me dijo: “Con un tatuaje cristiano puedo mostrar a los demás que soy cristiano.” Le respondí: “Creo que es muy triste que necesites un tatuaje para que alguien sepa que eres cristiano“. Seréis conocidos por los frutos, no por las marcas en el cuerpo (tatuajes).
Y por último, pero no menos importante, aquí está la gran pregunta que subyace bajo toda la conducta y la moral cristiana: “¿Qué haría Jesús?” Si Jesús de Nazaret o Juan el Bautista o el apóstol Pablo vivieran en el siglo XXI, ¿de verdad crees que irían corriendo a la tienda de tatuajes para unirse a la última moda? Por alguna extraña razón, no lo creo. Si soy sincero –totalmente sincero- de la mayoría de la gente “cristiana” que he conocido que se ha tatuado (repito “la mayoría”), no son demasiado serios en su vida espiritual.Pueden ser buenos chicos, dicen cosas buenas y son populares, pero casi todos carecen de madurez y peso espiritual. Esa ha sido mi propia experiencia personal. Todavía no he conocido a un guerrero de oración lleno del Espíritu Santo que me pregunte acerca de si puede o no tatuarse. Me pregunto por qué. Me parece ridículo que en varias partes del mundo nuestros hermanos cristianos están derramando su sangre por la extensión del Evangelio y aquí estamos nosotros viviendo para nuestra comodidad en el Occidente debatiendo sobre si debemos de hacernos tatuajes, fumar porros, emborracharnos en discotecas, tener relaciones sexuales antes del matrimonio y otras tonterías mundanas. ¡Qué vergüenza! Otra vez digo: ¡Qué vergüenza! ¿Qué clase de discipulado es éste que estamos viviendo? Es como si fuera otro tipo de fe totalmente distinta en la cual el concepto de ‘llevar nuestra cruz’ no existiera. ¿Qué pensará el Señor Jesús de semejante ‘fe’?
Creo que si algún cristiano responde a estas cinco preguntas con sinceridad y oración, dudo mucho que él (ella) siguiera sintiendo el deseo de hacerse un tatuaje. Es por eso que no tengo uno y nunca voy a hacérmelo. No veo cómo podría glorificar a Dios, mi conciencia está inquieta, no está tranquila al respecto, lo sé, ofendería a muchos hermanos y hermanas en Cristo si tuviera uno, estoy seguro de que algunos creyentes que conozco se sorprenderían demasiado y estoy absolutamente convencido de que ni Jesús (ni ningún otro hombre o mujer de Dios en la Biblia) se haría uno.
Y SOBRE LOS PIERCINGS, LA WEB CRISTIANA:
http://destellodesugloria.org/blog/?p=2667
EXPLICA LO SGTE.:
La palabra “piercing” se pronuncia en español “pirsin”, es la práctica de ponerse adornos del mismo nombre atravesando la piel. Pierce es un término que en el idiomaingles significa: “perforar” en pocas palabras seria colocarse un aro de material especial (acero quirúrgico, titanio u oro) en diferentes partes del cuerpo.
Muchas tribus de origen africano, oriental y polinésico tienen por costumbre pagana – religiosa, perforarse su cuerpo como muestra de sacrificio ofrecido a sus dioses y para demostrar su absoluta sujeción a ellos.
Muchos de nosotros por falta de conocimiento queremos imitar lo que vemos, “modas” que tienen un trasfondo pagano. Claro que la Biblia dice: “Todo me es licito” pero recuerda que no todo conviene y el hecho de andar un piercing en lugar de dar un buen testimonio de ti esta dejando mucho que desear, recuerda que la Biblia dice: “Somos cartas leídas para el mundo” (2 Corintios 3:2).
Luego que Dios llama a Jacob para bendecirlo, este toma una actitud positiva lo podemos ver en Génesis 35: 2-4: “Entonces Jacob dijo a su familia y a todos los que con él estaban: Quitad los dioses ajenos que hay entre vosotros, y limpiaos, y mudad vuestros vestidos. Y levantémonos, y subamos a Bet-el; y haré allí altar al Dios que me respondió en el día de mi angustia, y ha estado conmigo en el camino que he andado. Así dieron a Jacob todos los dioses ajenos que había en poder de ellos, y los zarcillos que estaban en sus orejas; y Jacob los escondió debajo de una encina que estaba junto a Siquem”.
BONUS TRACK: Si el artículo no fuera suficiente, te dejo un video del pastor y médico Miguel Núnez, quién presenta exclentes argumentos sobre este tema:
Atte. César Angelo / Blog Contralobos